Con un incremento del 341% en ofertas de empleo para IA generativa y un 78% para energías renovables, McKinsey posiciona a estas tecnologías como líderes en la transformación de este año.
El reciente estudio “Perspectivas de tendencias tecnológicas de McKinsey para 2024” del Consejo Tecnológico de McKinsey revela una notable evolución en la adopción y desarrollo de tecnologías avanzadas. Dos de las áreas que encabezan las tendencias más novedosas para este año son la inteligencia artificial (IA) y las energías renovables, destacando no solo por su creciente adopción, sino también por sus potenciales efectos a largo plazo en la industria y la sociedad.
La IA de última generación ha sido una de las áreas con mayor crecimiento, reflejado en un aumento significativo del 700% en las búsquedas de Google entre 2022 y 2023. Este incremento también se ha visto en las ofertas de empleo y las inversiones en el sector. Los modelos de IA generativa, por ejemplo, han demostrado capacidades avanzadas, permitiendo la creación de contenido nuevo a partir de datos no estructurados, como texto, imágenes, música y modelos 3D. Estos avances no solo automatizan tareas, sino que amplían y aceleran el trabajo en diversas industrias, destacando herramientas como ChatGPT.
Por otro lado, la electrificación y las energías renovables se han consolidado como elementos esenciales en la transición hacia fuentes de energía más limpias y sostenibles. La cadena de valor de producción, almacenamiento y distribución de energía ha incorporado tecnologías como la energía solar y eólica, la energía nuclear y el hidrógeno, y soluciones de almacenamiento como los sistemas de baterías de larga duración. Estas tecnologías son cruciales para cumplir con los objetivos del Acuerdo de París, que busca una reducción del 45% en las emisiones globales de carbono para 2030 y emisiones netas cero para 2050.
El impacto de estas tendencias no se limita solo a la creación de empleo, que ha visto un aumento del 8% en las ofertas laborales entre 2021 y 2023, sino que también estimula la innovación y el interés empresarial en estas tecnologías. La inteligencia artificial generativa, por ejemplo, ha registrado un incremento del 341% en ofertas de empleo, mientras que el campo de las energías renovables ha visto un aumento del 78%.
Este entusiasmo por la innovación tecnológica se extiende a otras áreas como la movilidad, donde los vehículos autónomos y eléctricos, así como la movilidad aérea urbana, están avanzando hacia una adopción a gran escala. También en el campo de las tecnologías espaciales, la reducción de costos ha incrementado la viabilidad y relevancia de estas tecnologías, aunque aún enfrentan desafíos tecnológicos y geopolíticos.
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