Un informe revela que Siri está hasta un 25% por detrás en precisión comparado con ChatGPT, lo que genera inquietud sobre la posición competitiva de Apple en el acelerado mercado de la IA.
Apple ha estado trabajando intensamente para mejorar sus capacidades de inteligencia artificial (IA), pero un reciente análisis interno ha encendido las alarmas dentro de la compañía. Según un informe publicado por el periodista Mark Gurman de Bloomberg, la investigación reveló que el asistente de voz de Apple, Siri, se encuentra considerablemente rezagado frente a otros modelos de IA, como ChatGPT de OpenAI.
El estudio destaca que ChatGPT es un 25% más preciso que Siri y tiene la capacidad de responder un 30% más de preguntas, lo que pone en entredicho la competitividad de Apple en un sector que avanza rápidamente. Estas cifras indican que la tecnología de IA generativa de Apple está al menos dos años por detrás de líderes de la industria como OpenAI, lo que supone un desafío importante para la empresa en su intento de no perder terreno.
A pesar de este diagnóstico poco alentador, Apple sigue avanzando con la implementación de funciones basadas en IA en su línea de productos. El más reciente ejemplo es el nuevo iPad mini, que incluye hardware diseñado específicamente para soportar Apple Intelligence, la plataforma de IA que la compañía está desarrollando. Sin embargo, estas capacidades de IA no estarán disponibles de inmediato, ya que los usuarios deberán esperar una actualización de software posterior al lanzamiento del dispositivo, lo que podría generar frustración entre quienes esperaban aprovechar estas funciones desde el primer momento.
El retraso en el desarrollo de la IA de Apple no ha pasado desapercibido, y sus competidores continúan avanzando a un ritmo vertiginoso. Mientras que empresas como OpenAI, Google y Microsoft han puesto en el mercado herramientas de inteligencia artificial generativa con aplicaciones tangibles y precisas, Apple parece estar luchando por mantener el ritmo en este entorno altamente competitivo.
El desafío para Apple es claro: cerrar la brecha en un campo que se ha vuelto crucial para el futuro de la tecnología. La inteligencia artificial está cambiando la forma en que interactuamos con nuestros dispositivos, y compañías como OpenAI han demostrado que los asistentes virtuales pueden ser mucho más eficientes y capaces de realizar tareas complejas sin necesidad de intervención humana.
Para Apple, la clave estará en cómo y cuándo logre implementar mejoras significativas en su IA. La empresa ha demostrado a lo largo de su historia que tiene la capacidad de innovar y recuperar terreno, pero en este caso, el reloj avanza rápidamente, y los consumidores, junto con los expertos de la industria, estarán atentos a ver si Apple puede competir al mismo nivel que los gigantes de la IA en los próximos años.
Por ahora, la empresa de Cupertino sigue en carrera, pero necesitará acelerar su desarrollo en este campo si quiere mantener su estatus como líder tecnológico en la era de la inteligencia artificial.
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