El pionero en el desarrollo de redes neuronales dejó la empresa y dio una entrevista en la que advierte sobre los peligros de los sistemas de IA. "No son más inteligentes que nosotros, pero pronto lo serán. Así que debemos preocuparnos", lanzó.
Geoffrey Hinton, una figura destacada en el campo de la inteligencia artificial (IA) y pionero del aprendizaje profundo, renunció a su cargo en Google y expresó su preocupación por los riesgos potenciales asociados con algunas de sus creaciones de IA.
Hinton, quien ganó el Premio Turing por sus contribuciones a la IA, incluido el avance del concepto de redes neuronales, dejó la empresa después de una década para hablar abiertamente sobre sus temores con respecto a la tecnología. En una entrevista con el New York Times, discutió el potencial de la IA para eliminar trabajos y volverse consciente, así como su pesar por el impacto de sus propias innovaciones.
Hinton declaró que le resulta difícil imaginar cómo evitar que los malos actores usen su tecnología para fines nefastos. Aunque expresó su gratitud por la oportunidad de trabajar en IA, también reconoció los peligros potenciales que plantea. Hinton tuiteó su apoyo a hablar libremente sobre la IA y aclaró que sus preocupaciones no tenían como objetivo criticar a Google, quien cree que actuó de manera responsable.
Si bien Google aún no ha anunciado la partida de Hinton, informó a la compañía de su decisión el mes pasado y habló con el CEO de Alphabet, Sundar Pichai, el jueves de la semana pasada. Aunque Hinton se negó a revelar los detalles de su conversación, su decisión de dejar Google llegó en un momento crucial, ya que la empresa compite por el dominio en el campo de la IA generativa. Esta área ha ganado prominencia en los últimos años, en parte debido al auge de ChatGPT de OpenAI respaldado por Microsoft.
En la entrevista con el Times, Hinton expresó que, si bien pocos creían que la IA podría superar la inteligencia humana, él solía pensar que era una posibilidad lejana, al menos dentro de 30 a 50 años. Sin embargo, ya no tiene esa opinión y está preocupado por el peligro potencial que la IA podría representar para la humanidad si su comportamiento inesperado se vuelve realidad.
Hinton también está preocupado por las ramificaciones económicas de la IA avanzada, que podrían provocar el desplazamiento de puestos de trabajo e incluso el vuelco del sector laboral. Según un informe de Goldman Sachs, aproximadamente el 18% de los trabajos en todo el mundo podrían automatizarse mediante IA, con un mayor impacto en los mercados desarrollados que en los emergentes.
Solo en los Estados Unidos, alrededor de dos tercios de los trabajos están expuestos a algún nivel de automatización por parte de la IA, y la mayoría tiene una parte significativa de su carga de trabajo que puede ser reemplazada por la IA.
Hinton teme el día en que las armas totalmente autónomas puedan convertirse en realidad, y la firma de investigación Gartner advirtió anteriormente que la aparición de tecnología armada podría provenir de actores de amenazas que utilizan entornos de tecnología operativa para causar víctimas humanas para 2025. Para mitigar los peligros potenciales de la IA, Hinton aboga por un esfuerzo global y unido para controlar la tecnología, incluida la formación de una organización global para regular la industria.
A pesar de las preocupaciones, se han invertido miles de millones de dólares en IA generativa y los inversores siguen viendo el potencial de la tecnología, según un estudio reciente de CB Insights.
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