top of page

IoT en la oficina inteligente: productividad y confort

Con el Internet de las Cosas (Internet of Things o IoT, por sus siglas en inglés) popularizándose en el hogar y en las ciudades, es natural que la automatización llegue a las oficinas a través de esta tecnología. Los últimos informes de consultoras señalan que el mercado de las oficinas inteligentes está en franco crecimiento: el dinero que se ha puesto en ellas llegó a los US$ 22.210 millones de dólares en 2017. Para 2023, se prevé que dicha cifra se duplique, alcanzando los US$46.110 millones.

IoT hace que los objetos se conecten a Internet, algo que permite controlarlos de forma remota o recopilar y compartir datos y comunicarse sin la participación de un ser humano. Un espacio de oficina equipado con dispositivos IoT y, por lo tanto, conectado a Internet, conforma lo que se conoce como una “smart office”, un ecosistema inteligente que se basa en una serie de equipos conectados que, en general, monitorean, controlan y administran diversas operaciones y condiciones de trabajo.

Gran parte del interés inicial en los dispositivos de IoT se ha centrado en el hogar, ya sea la asistente virtual Alexa, de Amazon, los altavoces inteligentes de Google Home u otros dispositivos como enchufes, lámparas, candados, máquinas de café, sensores de movimiento, sensores de calidad del aire y cámaras inteligentes. Estos mismos dispositivos también se pueden encontrar reutilizados en el espacio laboral, ya sea en las oficinas domésticas o en un entorno más corporativo.

IoT en el lugar de trabajo puede involucrar una variedad de hardware y tecnologías como dispositivos inteligentes, robots e inteligencia artificial para mejorar la eficiencia. Al utilizar Internet de las Cosas en las oficinas, es factible aumentar la productividad en el lugar de trabajo, optimizar las tareas rutinarias y lograr que los empleados tengan entornos de trabajo más seguros y cómodos. Aquí, IoT se puede dividir en tres categorías principales: infraestructura, dispositivos domésticos inteligentes rediseñados y dispositivos IoT específicos para la empresa.


¿Qué beneficios conlleva? Ajustar automáticamente la iluminación y la calefacción de las oficinas, hace que los recursos energéticos puedan ser utilizados de un modo más eficiente, evitando desperdicios, lo que redunda en ahorros a nivel económico y en un mayor cuidado del medioambiente. Por otro lado, crea ambientes laborales más confortables, puesto que la IoT permite controlar variables como por ejemplo la temperatura y la humedad ambiental directamente desde un sistema centralizado y automático, con lo cual los lugares de trabajo son más confortables.

Las tareas que se realicen con la ayuda de dispositivos dotados de IoT se agilizan y automatizan, lo que libera al recurso humano para realizar otras actividades más creativas y complejas. Además, soluciones de oficina basadas en IoT, como cámaras de seguridad, sensores conectados o sistemas de control de acceso, permiten que las oficinas sean más seguras.

Cada vez más, los proveedores intentan agregar un nivel de inteligencia a los dispositivos que se utilizan en las oficinas para que sean más útiles y fáciles de controlar. Y constantemente se suman nuevas tecnologías: escritorios inteligentes que pueden advertirle a su usuario si ha estado sentado (o parado) demasiado tiempo y recopilar datos para alentarlo a mejorar sus hábitos, por ejemplo. Las grandes empresas de tecnología también están centrando su atención en las formas de unir todos estos dispositivos dispares para que sean gestionados de manera más eficaz y pocos dispositivos IoT en el entorno de la oficina tendrán un teclado, lo que significa que el control de voz será el estándar.

Para ser más efectivos, estos dispositivos deben coordinarse a través de un solo asistente digital virtual. Estos asistentes digitales incorporan cada vez más el aprendizaje automático y elementos de inteligencia artificial para permitirles responder más eficazmente a las preguntas.

A fines del año pasado, Amazon presentó Alexa for Business, que permite a las empresas utilizar su asistente digital Alexa en un entorno de oficina. Actualmente, es el asistente digital para oficina más definido. Por ejemplo, las organizaciones pueden usar los altavoces inteligentes Amazon Echo en la oficina para proporcionar información, como la ubicación de la sala de reuniones gratuita más cercana, o para permitir que el personal solicite suministros. El personal podría usar un Echo en su escritorio para tareas más personales, como hacer llamadas telefónicas o enviar mensajes, revisar calendarios y listas de tareas, o para acceder a información de aplicaciones comerciales. Y claro está, detrás (o delante) de todas estas posibilidades hay siempre un cerebro, un chipset, o varios. Por ejemplo, los chips Wi-Fi MediaTek MT7686, MT7682 y MT5932 ofrecen altos niveles de integración con bajo consumo de energía para aplicaciones de domótica, dispositivos IoT y conectividad en la nube.

Así, la innovación que representa la posibilidad de combinar lo mejor de distintas tecnologías a través de la IoT está transformando nuestra forma de vivir y trabajar.

Comments


bottom of page